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Camilo y Che en Fidel

Fecha: 

28/10/2022

Fuente: 

Verde Olivo

Autor: 

Durante la Guerra de Liberación Nacional que tuvo como escenario principal la legendaria Sierra Maestra, Camilo Cienfuegos Gorriarán y Ernesto Guevara de la Serna, dos grandes héroes de aquella epopeya, junto a otros aguerridos combatientes, siempre vieron en el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz al líder capaz que junto al destacamento guerrillero cambiaría los destinos de Cuba.
 
“Gracias por darme la oportunidad de servir más a esta dignísima causa por la cual siempre estaré dispuesto a dar mi vida. Más fácil me será dejar de respirar que dejar de ser fiel a su confianza[…]”.1Esa fue la respuesta de Camilo a Fidel el 23 de abril de 1958 por su ascenso a Comandante.

Escribe el Che en su carta de despedida dirigida a Fidel y leída el 3 de octubre de 1965:“En los nuevos campos de batalla llevaré la fe que me inculcaste […] Que te doy las gracias por tus enseñanzas y tu ejemplo y que trataré de ser fiel hasta las últimas consecuencias de mis actos”.2
 
Camilo llega a México el 21 de septiembre de 1956.Antes, a su paso por los Estados Unidos, le escribió a un amigo: “Mi único deseo, mi única ambición es ir a Cuba a estar en las primeras líneas cuando se combate por el rescate de la libertad[…]”.3 Quería incorporarse a los preparativos de la expedición. Es así que realiza los primeros contactos y le responden que ya estaban seleccionados los que marcharían a Cuba. Insiste y Fidel indaga, entre otros, con René Rodríguez Cruz, y este le informa de la actitud decidida de Camilo. Fidel aprueba su inclusión.
 
El Che llega a México procedente de Guatemala y en el mes de julio de 1955, a través de Raúl Castro Ruz, contacta con Fidel. El médico argentino le causa honda impresión. Sobre el primer encuentro, el Che relata en sus escritos: “Lo conocí en una de esas noches frías de México y recuerdo que nuestra primera conversación versó sobre política internacional. A las pocas horas de la misma noche —en la madrugada— era ya uno de los futuros expedicionarios”.4 Por su parte Fidel le diría a Frei Beto años más tarde: “[…] cuando nosotros nos encontramos con el Che ya era un revolucionario formado; además, un gran talento, una gran inteligencia, una gran capacidad teórica”.5
 
Desde la primera acción guerrillera, el ataque al cuartel de La Plata el 17 de enero de 1957, Camilo se destaca por su audacia y valor. “¡Y así, en el pelotón de la vanguardia de nuestra columna, estaba Camilo![…]”.6 Se convierte en el hombre de confianza de Fidel en los momentos más difíciles de la guerra.   

El Che quien ya no era solo el médico sino un destacado combatiente “empieza a descollar: características humanas, intelectuales, pero más tarde en la guerra también militares, su capacidad de jefe, su valentía”.8 Además de la Columna No. 1 José Martí dirigida por Fidel surge una nueva: la Columna No.4. Fidel asigna al Che para comandarla.  En abril de 1958, orientado por Fidel, el argentino funda la Escuela de Reclutas del Ejército Rebelde en Minas de Frío, que prepararía a nuevos combatientes. A raíz de aquella designación, Camilo le escribe al Che: “Che, hermano del alma. Recibí tu nota y veo que Fidel te ha puesto al frente de la escuela militar, mucho me alegra pues de ese modo podremos contar en el futuro con soldados de primera[…]”.9 En el crisol de la lucha contra la dictadura batistiana entre Camilo y el Che creció una amistad entrañable a pesar de tener caracteres distintos.     
 
En la fase final de la guerra, Fidel emplea al Che y Camilo en una misión estratégica: dirigir dos columnas, No. 8 Ciro Redondo y No. 2 Antonio Maceo, respectivamente. Ya en Las Villas, Fidel ordena que continúen hacia La Habana. El Che debe tomar la Fortaleza de la Cabaña y Camilo el Campamento Militar de Columbia. Cumplieron con creces las misiones.
 
Con la Revolución triunfante y la llegada de la Caravana de la Libertad a la capital, el 8 de enero de 1959, Fidel realiza desde Columbia la primera alocución al pueblo. En una pausa del discurso le preguntó a su hombre de confianza: “¿Voy bien Camilo?”. “Vas bien Fidel”, le respondió el intrépido guerrillero. Al decir del Che: “[…] no significaba la casualidad de una pregunta hecha, a un hombre que de casualidad estuviera a su lado, era la pregunta hecha a un hombre que merecía la total confianza de Fidel”.11
 
Hay que destacar otro momento de la fidelidad de Camilo hacia el Comandante. Es el juego de pelota que se celebró el 24 de julio de 1959 en el Estadio del Cerro, hoy Latinoamericano, entre los equipos Barbudos y la Policía Militar.  El Héroe de Yaguajay debía jugar en el segundo, apareció en el terreno con el traje de los Barbudos y le comunicó a los periodistas: “Yo no estoy contra Fidel ni en un juego de pelota”.
 
Con el sol de enero, Camilo y el Che, propuestos por Fidel, ocuparon altas responsabilidades. El primero, el 21 de enero de 1959, fue nombrado jefe del Estado Mayor del Ejército y contribuyó de manera eficiente a restructurar, instruir y educar a los combatientes.  El segundo, como Ministro de Industrias, desarrolló una ardua tarea en este sector tan estratégico de la economía del país. Era la etapa de las nacionalizaciones.
 
El 28 de octubre de 1959, la avioneta en que regresaba Camilo desde Camagüey a La Habana no llegó a su destino. Ante su desaparición fueron varios los días de búsqueda hasta que el 12 de noviembre Fidel informaba al pueblo sobre la infructuosa gestión: “[…] hombres como Camilo Cienfuegos surgieron del pueblo y vivieron para el pueblo.[…] Camilo vive y vivirá en el pueblo”.
 
El 8 de octubre de 1967 el Che es herido en combate y apresado en la Quebrada del Yuro, Bolivia. Lo Llevan a una escuela en La Higuera y lo asesinan al día siguiente. “Nos dejó su pensamiento revolucionario, nos dejó sus virtudes revolucionarias, nos dejó su carácter, su voluntad, su tenacidad, su espíritu de trabajo. En una palabra, ¡nos dejó su ejemplo!”.12
 
Estas palabras de Fidel, entre otras tantas expresiones sobre los dos inmortales guerrilleros, demuestra la confianza que tuvo en ellos: “Cuando perdimos a Camilo, dije aquello de que en el pueblo hay muchos Camilo, y después lo repetimos cuando cayó el Che. Ya expliqué cuán relativa fue aquella caída y cuán vivo y presente está entre nosotros. Sí, siempre hemos creído que en el pueblo hay muchos Camilo y en el pueblo hay muchos Che…”.15
 
Hoy nuestros niños pioneros y el pueblo en general gritan: “Seremos como el Che”. “En su renuevo continuo e inmortal Camilo es la imagen del pueblo” y “¡Fidel es Fidel!”.
 

Referencias:  Tomado de fidelcastro.cu.
2 Guevara, Ernesto.Carta de despedida, Revista Bohemia, octubre de 2017, p.49.
3 Citada en William Gálvez.Camilo, señor de la vanguardia, Editorial Ciencias Sociales, La Habana, 1979, pp.136-40.   
4Guevara,Ernesto.Una revolución que comienza,Pasajes de la guerra revolucionaria. Escritos y Discursos, t. II, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 1972.
5Beto,Frei.Fidel y la religión. Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado, La Habana, 1985, p.372.
6Discurso pronunciado por Fidel ante los miembros del PURS de las provincias de Pinar del Río, La Habana y Matanzas, efectuado en el teatro Chaplin el 22 de febrero de 1963.
7Beto,Frei.Fidel y la religión. Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado, La Habana, 1985, p.377.
8Beto,Frei.Fidel y la religión. Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado, La Habana, 1985, pp.373-374.
9 Fragmento de una carta de Camilo al Che el 24 de abril de 1958.
10Discurso pronunciado por Fidel en la sesión solemne de constitución de la Asamblea Nacional del Poder Popular, celebrada en el teatro Karl Marx el 2 de diciembre de 1976.
11Discurso en homenaje al Comandante Camilo Cienfuegos pronunciado por Ernesto Che Guevara en acto realizado en el Ministerio de la Construcción el 28 de octubre de 1964, a cinco años de la desaparición física del “Señor de la Vanguardia”.
12Discurso pronunciado por Fidel en la velada solemne en memoria del comandante Ernesto Che Guevara, Plaza de la Revolución, 18 de octubre de 1967.
13Beto,Frei.Fidel y la religión. Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado, La Habana, 1985, p.375.
14Beto,Frei.Fidel y la religión. Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado, La Habana, 1985, p.378.
15Discurso pronunciado por Fidel en la clausura del V Congreso del Partido Comunista de Cuba, efectuada en el Palacio de las Convenciones el 10 de octubre de 1997.