"Es necesario que cada marxista–leninista comprenda que él puede contribuir al marxismo–leninismo con un átomo de su experiencia, que cada solución que él encuentre, cada experiencia que él adquiere, en la solución correcta de un problema, será una experiencia más con la cual enriquece al marxismo–leninismo, porque el marxismo–leninismo se ha enriquecido tanto precisamente por la experiencia de millones y millones de marxista–leninistas actuando en la realidad de la vida. Además, la idea que deber tener cada marxista–leninista de que los problemas son infinitos, de que los problemas son variados, y de que constantemente la vida nos irá presentando delante nuevos problemas, nuevas tareas".
Riferimento al testo originale:
Discurso en la Reunión de los Directores de las Escuelas de Instrucción Revolucionaria, 20 de diciembre de 1961