En Naciones Unidas no puede haber discriminaciones, dijo Alarcón
El presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de Cuba, Ricardo Alarcón de Quesada, afirmó esta tarde que en Naciones Unidas no puede haber discriminaciones. En conferencia de prensa ofrecida esta tarde en la sede del evento de Financiación para el Desarrollo, Alarcón, jefe de la delegación cubana, no hizo declaraciones previas, sino se sometió al interrogatorio de los periodistas, que inmediatamente preguntaron sobre las razones por las que el Presidente de Cuba, Comandante en Jefe Fidel Castro, regresó a La Habana. Alarcón señaló que se debió a una situación especial y que la delegación prefería mantener la discreción al respecto.
Añadió Alarcón que en su caso estaba dispuesto a participar, y vino preparado para ello, en todas las actividades que se realicen en el marco de la Conferencia, del mismo modo que si hubiese estado Fidel.
El Comandante en Jefe hubiera participado en esa y en muchas otras de no haberlo obligado las circunstancias mencionadas por él que lo obligaron a retirarse y regresar a Cuba. Hay determinados principios y normas -añadió Alarcón- que son de universal cumplimiento en el marco de la Organización de Naciones Unidas.
"Yo no conozco antecedentes de trato diferencial ni discriminatorio hacia los estados miembros, y en consecuencia, Cuba aspira en estos eventos a recibir la misma posibilidad que los demás participantes en esta conferencia". El Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular aclaró que la ONU convocó la conferencia e invitó a participar a todos los estados miembros y por eso, en la medida que el retiro es parte de las actividades de esta conferencia, "si yo no participase sería porque estaría siendo discriminado y Naciones Unidas no podría asumir esa responsabilidad".
"Luego que otro periodista preguntara sobre una supuesta carta de Fidel de que tendría una participación mínima en la Conferencia, el Presidente del Parlamento cubano explicó que conocía a Fidel Castro desde hace mucho tiempo y no lo había visto actuar en formas mínimas en tanto es un hombre que cuando se empeña en algo, se empeña a fondo y sabe dedicarse a las cosas de un modo tal para el cual el calificativo de mínimo resulta muy extraño.".
"El vino a Monterrey -añadió- dispuesto y preparado a trabajar a fondo en todas las actividades de la Conferencia. Esta mañana permaneció todo el tiempo en la sala escuchando todos los discursos que se hicieron hasta pronunciar el suyo propio". Sobre supuestas presiones del Presidente de Estados Unidos para excluir a Cuba de la Conferencia, Alarcón aclaró que Bush estaría pronto en Monterrey y sería la persona apropiada para responder sobre eso.
Respecto al trato que recibió, Alarcón destacó que la delegación había sido atendida con la habitual hospitalidad que siempre ha recibido en México e insistió en que podría haber alguna actividad privada, pero, en una situación hipotética, si se le quiere dar un carácter oficial relacionado con la Conferencia y él no pudiera participar, estaría siendo discriminado.
Sobre las expectativas de la Cumbre, dijo que existe un contraste entre lo que se anuncia como resultado inminente de la Cumbre y las expectativas de las gente. Millones de personas que esperaban otra cosa y no un consenso prácticamente impuesto que, como dijo hoy el jefe de un gobierno de Europa occidental, era un documento banal que no ofrece realmente respuestas a los grandes problemas de la humanidad en este mundo. Fue un documento impuesto y banal, reiteró. No hubo oportunidad de discutirlo, debió haberse discutido profundamente.
El dirigente cubano expresó su confianza de que, en el futuro, los políticos sean capaces de crear un documento que responda a las necesidades de la humanidad.
Asimismo, Alarcón subrayó que Fidel ama mucho a México y "una buena parte de su vida está vinculada a este país y al pueblo mexicano, pero él vino a una conferencia de la ONU que está teniendo por sede la ciudad de Monterrey".